Poderoso caballero es 'Don Dinero', lo sabemos, y cuando tienes, puedes. Por eso, encontrar un Fissore Marinella personalizado para la realeza, no es nada sorprendente. Un concesionario italiano cuenta con el Fissore Marinella de la princesa Ira Von Fürstenberg.
La aristocracia históricamente siempre ha sido un poco caprichosa. No hace falta que me creáis a pies juntillas, solo tenéis que leer un par de libros para daros cuenta. Uno de los caprichos que más destacan entre los muchos que suelen tener, son los automóviles. Es algo tan típico como irse de vacaciones en agosto a la playa; el coche puede ser una clara muestra de estatus, además de ser una clara muestra de un profundo complejo o de ganas de llamar la atención siendo el centro de todas las miradas. Asimismo, no importa la edad del aristócrata en cuestión, sus gustos suelen ser muy, muy caros e incluso, un poco horteras, aunque siempre hay excepciones.
Si eres asiduo a Yclasicos sabrás que cuando empiezo con un tema en concreto, es que el artículo gira en torno a él y si no lo eres, pues ya lo sabes. Así que vamos a entrar ya en materia y vamos a dejarnos de dar vueltas. Para ello nos vamos a 1955, cuando el príncipe Alfonso de Hohen se casó en 1955 con una niña de 15 años, con Ira Von Fürstenberg, lo que supuso mucho debate y polémica por aquel entonces aunque eso, no nos interesa. Lo que nos interesa es precisamente el buen gusto que tenía esta chiquilla en temas automovilísticos y lo caprichosa que a priori, da a entender. Y digo ésto porque nuestro protagonista, un Fissore Marinella, un coche playero basado en el FIAT 600 Multipla, fue propiedad de esta señorita y que fue pensado para que fuera a hacer esquí acuático a Cerdeña.
Reconozco que no me he empapado a fondo de la historia del modelo, pero tampoco es que haga falta contar mucho al respecto. Sobre todo de la base empleada, el FIAT 600 Multipla, el cual, por favor, no hay que confundir con el FIAT Multipla presentado en 1998 y que pretendía recuperar la practicidad del considerado 'primer monovolumen del mundo', terminando considerado como el 'Automóvil más feo de 1999' por el programa de televisión británico 'Top Gear'.
El Fissore Marinella de Ira Von Fürstenberg se encuentra en un concesionario italiano, en 'Franco Lembo' y si nos fijamos en las fotos, el modelo está personalizado. Lo primero que llama la atención son los adornos de madera de la carrocería y sobre todo, los paragolpes. Personalmente no entiendo porque forran los paragolpes con madera, pero en fin, ya se sabe como son los gustos de esta gente... los asientos traseros están enfrentados y el techo de diseño para poder acoger un par de esquís acuáticos. Evidentemente, tapicería y enmoquetado es todo específico.
Javi Martín
